Conocimiento y Formación
Es un proceso formativo sobre la reconstrucción de la memoria y de la verdad en relación al conflicto armado y la violencia en Colombia. Entre el 9 de abril y el 9 de septiembre, buscamos facilitar espacios de reflexión y empatía que, acerquen la realidad social y política del país a la cotidianidad de las y los jóvenes con sus entornos, haciendo de estos espacios de encuentro ciudadanas y ciudadanos, constructoras de paz.
Es un movimiento de jóvenes para jóvenes. A través de un proceso, formamos hombres y mujeres profundamente humanos y auténticos que desde el seguimiento de Jesús y en medio de la realidad de su pueblo, sean capaces de crear espacios de vida en servicio, liderazgo y solidaridad con los más necesitados.
El Movimiento está estructurado en etapas de formación a partir de las edades:
- Huellas blancas: adolescentes de 10 a 12 años. Allí se profundiza en la experiencia de la amistad y la fe a nivel personal y grupal.
- Huellas rojas: adolescentes de 11 a 13 años. Es una etapa para acompañar el fortalecimiento de la personalidad, el valor de la convivencia y de la fe compartida en medio de los interrogantes de su crecimiento.
- Huellas verdes: jóvenes de 13 a 15 años. La formación se centra en consolidar la identidad cristiana, tanto personal como grupal, para un mejor ejercicio de liderazgo.
- Huellas azules I: jóvenes de 14 a 16 años. El objetivo es vincular fe y vida, en una experiencia de liderazgo y apostolado. Es una etapa igualmente para crecer en el reconocimiento de la espiritualidad ignaciana.
- Huellas Azules II: jóvenes de 15 a 17 años. Es la experiencia de pre-comunidad juvenil desde la vinculación del servicio, la formación y la espiritualidad ignaciana. Implica la construcción de espacios de confianza para construir la amistad en Jesús.
- Huellas doradas: Jóvenes de 18 a 23 años. Son personas que optan conscientemente por construir una comunidad juvenil, formándose como hombres y mujeres al servicio de los demás.
El “Diálogo de colores” surge como una propuesta metodológica donde abordamos temas de reconciliación, de paz y de ciudadanía. Abriendo distintos espacios de co-construcción, los jóvenes reconocen a través del diálogo horizontal y creativo aquellas perspectivas, proyecciones, preguntas, intereses y posiciones frente a la construcción de un futuro esperanzador en nuestro país.
Sabemos que la palabra y la escucha se construyen, se aprenden y se manifiestan por medio de diversos universos de lenguaje. En ese sentido, la diversidad de colores representa enfoques distintos en la construcción de ese futuro en dignidad para nuestros jóvenes. En otras palabras, cada color simboliza una ventana de oportunidad para transformar nuestra realidad.
Los colores son:
Diálogos morados | Género y diversidad |
Diálogos verdes | Ecología integral |
Diálogos azules | Salud integral |
Diálogos amarillos | Cultura, arte y deporte |
Diálogos blancos | Paz |
Diálogos rojos | Participación política y ejercicio de la ciudadanía. |
El “Diálogo de colores” es, finalmente, la oportunidad de generar espacios de discernimiento desde los sentidos en perspectiva a la construcción de apuestas de transformación en las esferas de lo privado y de lo público a nivel local y nacional.
Es una propuesta para los egresados de los colegios de la Compañía de Jesús (ACODESI y Fe y Alegría). A través del encuentro fraterno, propiciamos tiempos para reconectarse con la espiritualidad, el servicio y el peregrinaje personal. Sentirse de nuevo en casa es un regalo para volver a las fuentes de los fundamental, en donde encontramos el sentido.